No se cómo he pasado de editar unas fotos a estar escribiendo estas líneas pero así es la vida. Un torbellino de emociones que llega en el momento que menos te esperas.
Llevaba mucho, una infinidad de días sin escribir. Lo echaba de menos pero no había nada que consiguiera hacer ese click necesario tras mucho tiempo sin tocar lo que hay dentro de tu alma. Y a lo mejor esto es lo que necesitaba, otras almas errantes que como la mía buscan una verdad más allá de lo que vemos a simple vista.
Espero que no quede aquí en un simple saludo hasta dentro de otras decenas o cientos de días pero si ha de ser así por el momento, seguiré fluyendo en el viento.
Feliz día 4 de diciembre de 2017. Y por si antes del cambio de año no os veo, felices fiestas y felices comienzos.
Gracias, con cariño
Mer