Es cierto que estamos atravesando un período duro de dificultades de todo tipo: duelos,enfermedades, contrariedades. Es cierto que si la salud no es buena el ánimo se desmorona y con él nuestra vida cae en un oscuro círculo de dolor y autocompasión que puede destruirnos.
No sabemos manejar la tensión, no queremos comprender cuanto cooperamos para atraer el mal o el bien a nuestras vidas, ojalá quisiéramos escuchar a los que conocen como vivir mejor.
Somos frágiles, cualquier acontecimiento nos puede desestabilizar, pero no es menos cierto que poseemos la fuerza inmensa que puede reinventar nuestra existencia. Esa fuerza está dentro de nosotros, podemos vencer si lo queremos, podemos mantener la sonrisa si la buscamos, si buscamos la magia de nuestros buenos sentimientos.
Ahora hay algunos de nosotros con penas, dudas, enfermedades o simple astenia primaveral.
¡Vamos entre todos a construir un rincón amable y cariñoso en nuestros corazones para permanecer mientras se curan nuestras heridas!
¡Vamos a soñar con salud, con soluciones y con un inmenso cariño que todo lo cura!
Y por encima de todos los agoreros...
¡Vamos a vivir!