Luces crecen otra vez
en la oscuridad de esta eterna noche
El valor hizo la negación de lo oscuro
No habrá ya más silencios,
No habrá más demoníacos espejos.
Al Huracán arrastran con ellos.
La vida se vuelve entera y nueva,
Remanso y destello, suave espuma
A la orilla de un mar ajeno.
Del vivir se empapan las orillas
Del nacer los nuevos senderos.
Hay una fuerza arrolladora
De cientos de miles de eternos.
Ya no caben los errores
Ya no hay excusas
¡No queda tiempo!
Se desencadena la selección
Se extreman los extremos
La pureza de los niños
Derrama los excesos
Exige la vida
Cuentas a los perversos
Exige la vida el reverso
Se reorganiza el aire
Se colman los silencios
Las lágrimas lavan heridas
Y las risas son el premio.
Julio 2007